Almacenamiento: La piedra en el camino de la energía renovable

Hasta ahora hemos hablado mayormente de las ventajas de las energías renovables, de sus baches a nivel burocrático, institucional y económico, de su gran repercusión ambiental… pero hoy vamos a ser un poco más críticos con el sector energético del futuro inminente.

Sabemos que podemos generar la energía de muchas formas y para muchos usos (placas solares fotovoltaicas, térmicas, aerogeneradores, etc.) ¿pero qué pasa si generamos más energía de la que necesitamos en el preciso momento de obtención, que pasa si no sopla el viento cuando más lo necesitamos, o justamente llevamos 5 días seguidos sin ver el sol en determinadas fechas del año?

Estos son los retos que afrontaremos hoy, el almacenamiento y la distribución de esa energía limpia que generamos, la disponibilidad de esta para ser usada a cada momento sin importar condiciones climatológicas, horario o época del año, garantizando un subministro de electricidad adecuado a las necesidades de los usuarios.

Las compañías eléctricas convencionales establecieron la distribución de los consumos con picos y valles, los picos durante las horas punta de consumos como cuando se levanta el país (7:00-9:00) y los valles cuando se acuesta (00:00-06:00). Pero la demanda en cada hogar o en cada empresa puede variar…

La generación y el consumo deben estar en equilibrio para mantener los niveles de frecuencia. Como en la energía hidroeléctrica, que dispone de grandes reservas de agua (estanques y lagos) para accionar generadores síncronos y producir electricidad.

A nivel doméstico la solución es clara, el uso de las baterías debido a la “pequeña” dimensión de las instalaciones en hogares es la mejor solución hasta ahora, además existiendo varios tipos ya más que estudiados como el plomo-ácido, el níquel y el Litio. Pronto veremos las baterías de flujo con hasta 10.000 ciclos al 75% de profundidad de descarga, diseñadas para aplicaciones de gran capacidad energética.

Pero a nivel industrial, infraestructuras, pueblos, ciudades, etc. Para conseguir este almacenamiento energético a gran escala es importante asegurar una calidad, una continuidad y una durabilidad como mínimo como la ya conseguida con la red existente eléctrica, y con complejos sistemas de baterías podemos conseguir-lo.

Una batería aparentemente es una tecnología más bien sencilla pero si se parametriza y configura un sistema de regulación de esta se puede llegar a tener un control exacto de la tensión, controlando las variaciones gracias a la aportación o consumo de potencia reactiva de nuestros generadores renovables y un control exacto de la potencia-frecuencia adecuando la generación de potencia activa manteniendo los niveles de frecuencia del sistema eléctrico (50Hz en Europa).

De esta manera el suministro energético de toda la red, sea de la dimensión que sea, asegura un estándar de calidad que incluso los propios fabricantes de generadores renovables avalan e indagan también ellos en sistemas de regulación incluidos en sus propias creaciones, como en ciertos aerogeneradores donde tienen absoluto control de la potencia que generan, y su tensión conectada a la red eléctrica.

Uniendo nuestras fuerzas contribuimos a que la energía renovable se necesaria en el sistema eléctrico actual, con un buen sistema de almacenamiento se podrán reservar los excedentes que no puedan ser inyectados en la red. Por otra parte el elevado coste y la vida útil estos sistemas los hacen un poco inaccesibles a día de hoy…Pero se están investigando posibles  tecnologías aplicables a los sistemas de baterías.

Donde la actual red eléctrica no ha llegado todavía es a la capacidad de gestionar activamente la demanda, aprovechando los excedentes de generación con consumos que si puedan adaptarse a la disponibilidad del recurso renovable.

Pero eso es hablar de futuro lejano, primero debemos centrar-nos en la más que posible adaptación de los sistemas de almacenamiento en nuestra red de generación renovable cubriendo las necesidades de predicción y regulación y abaratando el coste de la tecnología de la batería esperemos que el ideal de conseguir una red 100% limpia y renovable esté más cerca de lo que nos pensamos.

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